Especialista en Rehabilitación Oral, investigador y conferenciante con práctica privada en Barranquilla (Colombia). Fundador del grupo Dignificar la Odontología .
El mundo está en una debacle, precisamente porque se perdió el rumbo, donde se promueve incesantemente el culto al cuerpo, a un cuerpo artificial y creado, no natural, donde no escapa ni la boca. Yo veo una multitud de tratamientos innecesarios, aquellos que nadie con buen gusto y siendo un profesional con criterio se lo haría a un hijo/a, hermano/a, o alguien de sus entrañas.
La odontología dejó de tomarse como una ciencia para proporcionar salud y mantener los dientes en la boca en el mejor estado posible, para pasar a ser un negocio absolutamente lucrativo, gracias al manejo mental sobre la gente por medio del bombardeo de imágenes en los medios de comunicación en un mundo de consumo.
Cuando me recibí de odontólogo, aprendí que la odontología curaba, no que destruía, me enseñaron que teníamos que conservar los tejidos a, no que teníamos que destruir. Triste ver que hoy por dinero y en nombre de la estética destruyen.
“Ética NO es Negociable”.
Algo que me impresiona es percibir que los colegas que realizan esos mal llamados “Diseños de Sonrisas” a cualquier cosa que se mueva, llámense pacientes, clientes, borrego o como les quieran tildar, saltan iracundos apenas sienten que no les gusta lo que expreso, se sienten señalados, no se porque tienen que tomar mis conceptos de manera personal, solo quiero que se entienda que la “Ética NO es Negociable”. Si no les da la cabeza para pensar que lo que atravesamos es una pandemia y emergencia sanitaria, y se siguen promoviendo esos desastres de sonrisas o las bichectomías realizadas por neófitos en el tema, donde muchos lo han “aprendido” por tutoriales de youtube, es cuando me autocuestiono y me digo a mi mismo que no se puede pedir conciencia preventiva al respecto.
Cuando no se realizan procedimientos bien planeados y ejecutados, por falta de conocimiento y experiencia en los mismos, es cuando aparecen malos resultados, y como consecuencia, están generalizando todo, cuando para cada caso hay diferentes opciones, El tema real es que los odontólogos por dinero estan siendo “toderos”, esto significa que realizan cualquier tipo de procedimiento con la única finalidad de ganar dinero. Cuando nos metemos a hacer lo que no es de nuestra competencia, es cuando se presentan las complicaciones y los fracasos.
Ese es el problema real que estamos palpando, el número de personas que quieren esos estereotipos de belleza, aún a sabiendas que no es lo normal, está creciendo exponencialmente. Al final tristemente concluímos que eso es lo que les gusta, sueñan con tener y mostrar dientes blancos y enormes, así como mujeres que se hacen todo tipo de cirugías y retoques, y piensan que serán más felices luego de hacerlo. Ahí es cuando aparecen esos colegas que se aprovechan de la situación y de los deseos irracionales de los pacientes. A veces el paciente quiere esto y no te da otra opción.
Es más rápido hacer carillas o coronas que un tratamiento de ortodoncia. Y aunque uno quiere ser honesto, hay muchos que no y cuando expreso que por nada del mundo gastaría esmalte sano o haría carillas a quien no lo necesite, varios colegas han respondido que, si no se lo haces tu, el paciente va a encontrar otro que si se los va a hacer. Expresiones que me han lanzado colegas, «el paciente lo pide», o “el paciente firmó un consentimiento informado”, otros me han expresado que el paciente es el que paga y que al final es quien decide su futuro, nada de esto es excusa, nada de eso justifica la falta de ética.
Cuando me expreso lo hago en forma general, sin señalamientos, lo que expreso es por repudio a una práctica irresponsable, todo lo quieren solucionar a punta de resinas, carillas o como les quieran llamar a esos Resinomas que pululan por ahí, quiero expresarles que si creo en la Estética, pero Racional, Justa, buena, esa estética que no genere daño al periodonto, a las estructuras dentales ni a la integridad del paciente, evitar llegar a condiciones de daño periodontal, pero no, lo que esta de moda es algo totalmente Irracional.
¿Será que no le explican al paciente que esas carillas toca cambiarlas y que no son eternas?, ¿Que la posibilidad de que algún día terminen en coronas es alta? Con ortodoncia, aclaramiento y si acaso un arreglo de los bordes incisales la mayoría de las veces es suficiente. La triste realidad, odontólogos que simplemente les Interesa llenar la billetera, que tristeza. La Odontología estética existe y existirá siempre, de hecho, existimos los especialistas en rehabilitación oral, prostodoncia, operatoria estetica, lo malo no son las carillas que ademas están sustentadas en la literatura como una opción de tratamiento que bien realizada funciona perfectamente, lo malo es que la Estetica se volvió trabajo de todos, se conforman con un diplomado y boom a todo el mundo le quieren vender “diseños”.
Asi es lastimosamente se ha malinterpretado la estética, el paciente va por cambio de color en un 11 por un trauma y terminan llenándolo de carillas de canino a canino para “emparejarle el color de los dientes”, ¿por qué no se puede ser racional y arreglar solo el diente que está mal? Eso para mi significa dos cosas, 1, somos incapaces de manejar diente único en sector anterior para lo cual la solución requiere de más entrenamiento y actualización, 2. le quieren sacar como sea dinero al paciente. Y es lo que se ve día a día, no comprendo realmente de que se pueden sentir orgullosos, para mí esos taladradores de esmalte y dentina no deberían llamarse odontólogos. No importa que nuestros colegas ganen millones, para mi es más valioso dormir tranquilos.
Cuando le digo que no haría un procedimiento de esos a los pacientes, algunos entienden, otros no. Les hablo de la importancia de tener sus dientes naturales o la opción de ortodoncia, de la odontología mínimamente invasiva, algunos entienden, pero otros van adonde otro profesional y se los hacen. Hoy las propagandas, las redes sociales, los medios, la prensa, la tv, todos se volcaron a mostrar dientes blancos y perfectos, de estos abundan, y los pacientes te traen el posteo para que se las hagas igual, sigo en esa posición, les digo que no, la verdad es que prefiero mantenerme con mi conciencia limpia.
«Es muy real que el paciente es dueño de su boca, pero también puede ser dueño de una terrible ignorancia»
Poner en la balanza las diferentes opciones de tratamiento, personalmente entraría a insistir en la objeción de conciencia, todos los tratamientos que realizo, los justifico como si me los hiciera a mi mismo, es muy real que el paciente es dueño de su boca, pero también puede ser dueño de una terrible ignorancia, y en ese caso, quien mejor que nosotros para informarlo de que es lo mejor para él, aunque vaya en detrimento de nuestros intereses económicos.
Todo esto de los diseños es moda, una moda que con los años los pacientes se van a dar cuenta que no es tan bueno, hay casos donde el manejo con carillas es una solución espectacular, pero otros en los que para nada estaban indicadas. La Etica es una sola, pero hay quienes manejan varios niveles de valores y ética, hoy día es más importante lo estético y no lo naturalmente saludable, el cabello y las uñas crecen de nuevo, el esmalte no, ETICA Señores.
A veces el refran o adagio popular que dice “esto no es de flechas sino de indios”, lo dice claro, aunque tengas toda la tecnología del mundo y aunque uses los mejores materiales, si no lo haces de la manera correcta y respetando la biología, el fracaso llegará, tarde que temprano, pero llega. Esto es lo que te venden todos los días, dientes perfectos y radiantes, la gente los compra y el odontologo factura. Hacer una Odontologia Racional, basada en la Etica y en el respeto por la integridad de los seres humanos, soy de los pocos que se ha atrevido a decirles, basta, basta ya de tanta Carillología, creo en la estética, pero esa que está justificada, pero no la de hacer carillas a todo lo que se mueva, ya basta de decir “es que el paciente lo pidió”, ya basta de pensar con el bolsillo, ya basta de tanta indolencia.
¿Le harías lo mismo a un familiar, te gustaría que te hagan lo mismo? Piénsalo la Odontología de ahora no es buscar la perpetuidad del material, más si la perpetuidad del órgano dental, la prisa del paciente no puede decidir nuestro criterio, y
es cuando se me viene a la mente que existe un proverbio antiguo que dice: “Dios creó el tiempo, el hombre creó la prisa”.
