Webimar SECIB. Lesiones sospechosas

    Entre los últimos webinarios programados, que se pueden disfrutar en formato grabado y en diferido, en la “Sección de Socios SECIB” en página de SECIB on Line, quiero destacar el emitido en marzo de 2027.

    En este caso en colaboración con la Sociedad Española de Medicina Oral (SEMO) en clave médica. Presentado por el potente equipo de Medicina Oral de la Universidad de Santiago de Compostela, representados por el Dr. Andrés Blanco y la Dra. Pilar Gándara como ponentes y moderados por el Dr. Mario Pérez.

     

              

    En esta ocasión el tema elegido fue “Lesiones Sospechosas más típicas en la consulta, biopsia y principales factores pronósticos”. En referencia a esas situaciones que podemos encontrar al hacer una correcta exploración e inspección en las revisiones rutinarias de la salud oral de nuestros pacientes o que nuestros pacientes nos demandan al descubrirse algo que les preocupa en la boca, específicamente en algún punto de la mucosa oral, incluyendo lengua. Dado que ya nos empiezan a considerar como los responsables de su salud a nivel BUCAL en general … como especialistas en este territorio.

    Esta consideración acarrea una gran responsabilidad por nuestra parte y que requiere que estemos “a la altura”.

    De la presentación del Dr. Andrés Blanco se debe destacar como primera y máxima enseñanza que tenemos que tomar conciencia en la responsabilidad que tienen los ODONTOLOGOS  en el Diagnóstico precoz del Cáncer Oral. Responsabilidad que los que nos dedicamos a ver pacientes debemos asumir. Andrés defendió que el diagnóstico de cáncer es la actividad MAS importante en el “día a día” de una consulta odontológica. Por ello la inspección y exploración de las mucosas orales debe de estar en el primer punto de todos los protocolos de exploraciones y revisiones bucales. Seamos odontólogos generalistas o especialistas en la especialidad que sea, evitando sesgos propios de la misma.

    Presentó distintos casos clínicos, demostrando y describiendo los pasos a dar en este proceso de diagnóstico. Empezando todo por una adecuada exploración e inspección de la cavidad oral, para poder detectar elementos o situaciones sospechosas. Complementar esta inspección con la confección de una adecuada historia clínica con la cual nos pueda explicar las circunstancias en relación con la salud general o en relación con situaciones locales que nos expliquen dichos hallazgos. Identificando factores carcinogénicos que puedan dar las claves que indiquen pasos a seguir … que puedan justificar la realización de una BIOPSIA. Que en definitiva es el “arma” de diagnóstico más determinante que tenemos para estos casos. Y que lo único que debemos es “justificarla mínimamente” en el sentido de que se pueda argumentar su indicación.

    Acertadamente el Dr. Blanco explicó la necesidad del seguimiento de la evolución de las lesiones erosivas o ulceradas que aparentemente tiene un origen traumático en relación con una prótesis o a otra circunstancia. Por ejemplo, el típico diente fracturado, donde una vez eliminado el factor desencadenante debería desaparecer la lesión en un plazo inferior a 15 días. Y si por el contrario persistiera … esta sería una indicación clara toma de Biopsia.

    En este sentido otro aspecto que no se comentó pero que quedó explícito en la presentación, es la utilidad de la FOTOGRAFÍA. En estas lesiones o circunstancias anómalas que descubrimos es muy importante registrarlas iconográficamente por que entre otras cosas nos sirven para tener un control evolutivo. Siendo una herramienta fundamental de comunicación con otros compañeros o como elemento diagnostico que justifique determinadas actuaciones. Debemos tener en cuenta que las alteraciones de la mucosa se manifiestan como alteraciones en el color o discromías … lesiones blancas, rojas u oscuras (leucoplasias, eritroplasia, melánicas), alteraciones en el volumen … tumoraciones papilares pápulas, placas o papilares, nodulares o exofítica o como alteraciones de solución de continuidad de la integridad de la mucosa en forma de erosiones o ulceraciones y en ocasiones una combinación de varias alteraciones. Que se deben registrar una forma precisa en su aspecto clínico con una descripción correcta y es aquí donde la fotografía de calidad se nos muestra como una herramienta fundamental para adjuntar a la historia clínica.

    El Dr. Blanco explicó como ante este tipo de lesiones, además de una exploración exhaustiva con inspección y palpación para determinar las características físicas de las mismas, es preciso identificar factores que nos puedan activar sospechas de malignidad como son la identificación de signos de alarma, la evolución de la lesión en cuanto a persistencia en el tiempo, la existencia de factores carcinogénicos, síntomas y signos específicos como la ausencia de dolor e incluso parestesias … etc.

    Y como refiere el Dr. Blanco, al final lo verdaderamente determinante en este proceso de diagnóstico,  es la realización de tomas histológicas para estudio histopatológico a fin de poder identificar ante qué tipo de lesión nos encontramos … La única duda que se suscita es si la técnica de toma de la muestra sería decidir entre una BIOPSIA INCISONAL o ESCISIONAL. Recomendando que ante la sospecha de Malignidad SIEMPRE INCISIONAL. Eligiendo muy bien el sitio de la toma, preferentemente de una zona de transición, en caso de duda se aconseja realizar varias tomas. Siempre informando al patólogo del tipo de lesión, localización de las tomas y las características clínicas de las misma.

    Presentó distintos casos clínicos, demostrando como la BIOPSIA es la herramienta BÁSICA en el manejo de lesiones de la mucosa. Tanto para el diagnóstico como para el seguimiento y control de estas. Siendo una técnica básica para conocer.

    En este sentido continuó la Dra. Pilar Gándara hablando del manejo de las lesiones orales potencialmente malignas. Lesiones que como contó en su evolución tienen una tendencia importante o una alta posibilidad de malignizar en relación con determinadas circunstancias, de las cuales muchas actualmente no están todavía identificadas. Hasta el punto de que hay autores que ya a algunas de ellas proponen y defienden que se les considere situaciones PRECANCEROSAS.   

              

    Definió las Lesiones orales potencialmente malignas como “cualquier lesión de la mucosa oral que es asociada estadísticamente con un aumento de riesgo de desarrollo de cáncer”.

    Defendió la identificación de estas lesiones a nivel oral con el objetivo de poder reconocer a los pacientes de mayor riesgo de padecer un proceso grave y así conseguir su monitorización a fin de poder llegar a un diagnóstico Precoz. Siendo el diagnóstico precoz clave para el pronóstico de cáncer en general y del Carcinoma ORAL de Células Escamosas en particular.

    Leucoplasia, eritroplasia, eritroleucoplasia, leucoplasia proliferativa, enfermedad liquenoide oral, liquen plano en general, lesiones palatinas por fumar invertido, lupus eritematoso oral, fibrosis oral submucosa, queilitis actínica, enfermedad oral de injerto-huésped, disqueratosis congénita …  etc. son lesiones consideradas potencialmente malignas, que tenemos que ser capaces de identificar en la exploración oral, para poder monitorizar adecuadamente al paciente y poder llegar a diagnosticar una evolución a malignización en el momento más PRECOZ posible. Así acometer el tratamiento adecuado en el momento preciso que nos permita ofrecer al paciente un pronóstico más favorable.

    Porque como explica la Dra. Gándara, el carcinoma oral de células escamosas en estadios avanzados el pronóstico vital para el paciente es nefasto.  Ahí está, nuestra verdadera responsabilidad como profesionales de la salud en nuestro ámbito de influencia. Identificar, diagnosticar, monitorizar y llegar a una identificación precoz de una evolución a malignidad a fin de hacer un tratamiento adecuado en tiempo y forma. 

    Pilar explicó como con la exploración clínica se hace el diagnóstico de presunción clínica. Este requiere ser confirmado histológicamente mediante la toma BIOPSIA y con el estudio histopatológico nos confirma o nos compatibiliza el diagnóstico clínico y lo más importante nos identifica el grado de alteración del tejido en cuanto a la existencia de DISPLASIA o su ausencia. Dato determinante en cuanto a identificar su tendencia a malignizar.

    Estamos todos de acuerdo y Pilar lo subraya que cualquier odontólogo debe tener la capacidad de hacer una toma biopsia. Habilitado está … y formado debe.

    Ante una lesión de este tipo y con esta sospecha, la duda NO es si hay que hacer una biopsia, si no que tipo de biopsia (incisional o escisional) y de donde tomarla.

    Si la lesión es extensa es clave identificar el sitio más representativo de la lesión para tomar la “muestra”. Aquí la Dra. Gándara indica buscar el lugar más representativo en cuanto a los cambios morfológicos de la lesión. Donde se vean alteraciones de homogeneidad de esta, si las hubiera, siempre incisional. Y la muestra debe incluir en la toma la zona de transición a la parte sana de la mucosa. Cogiendo una cantidad suficiente de tejido que permita ver distintas zonas dentro de la misma, es decir ser “generoso” con la toma de la muestra. Solo se eliminará toda la lesión (escisonal) si esta es “pequeña” y la capacidad técnica del operador lo permite. Teniendo en cuenta que hay que eliminar toda la lesión con márgenes de “seguridad”, porque debemos eliminar con tejido sano alrededor.

    En este sentido es importante identificar y trasmitir de donde se toma la biopsia y para ello la fotografía intraoral, como se ha comentado anteriormente, es de gran ayuda tanto en el registro documental como en la transmisión de información a otros compañeros, como al patólogo, al cirujano, al oncólogo … etc.

    La Dra. Gándara también presento varios casos clínicos. Mostró la metodología adecuada de exploración y monitorización de estos pacientes. Reafirmando que las biopsias seriadas son el mejor método de identificación de diagnóstico de la evolución de estas lesiones potencialmente malignas. Dando las claves en cuanto a la adecuada técnica de toma de biopsia, así como el mejor método de comunicación con el patólogo, que nos permita identificar que lesiones más peligrosas en relación con el grado de displasia que presenten las muestras.

    Señalando esta característica en el estudio histológico del grado de displasia, como el verdadero parámetro que nos va a mostrar que esto que tenemos delante ya puede que no sea una lesión potencialmente maligna, sino si este grado de displasia se describe como moderado o severo, nos deben hacer pensar que ya debemos considerarla como un verdadero CARCINOMA IN SITU. Siendo esta situación de “CARCINOMA IN SITU” como una situación “óptima” de Diagnóstico Precoz de Cáncer que va a permitir acceder al paciente a un pronóstico más favorable de su problema, si se acomete ahora la derivación adecuada en tiempo y forma.

    Terminó identificando aquellas características o signos o factores que ante una lesión de este tipo nos tiene que poner en alerta. Explicando distintas situaciones, estudios o protocolos que favorecen la monitorización y manejo de estos pacientes, como los criterios que presentó en un interesante trabajo recientemente la Dra. Rocío Cerero de la Universidad de Complutense de Madrid.

    En conclusión, hay que felicitar tanto a SECIB como a SEMO y sobre todo al equipo de medicina oral y cirugía bucal de la Universidad de Santiago de Compostela. Una gran presentación con un mensaje muy potente para identificar las verdaderas responsabilidades de nuestra profesión si realmente se quiere reivindicar que la Odontología es una ciencia de la salud.

    Recomiendo “muy mucho” a los odontólogos generalistas y a odontólogos en general visualizar esta presentación que ha quedado grabada en el área del socio de la página de “SECIB ON LINE”.  Agradecerán la información que tan didácticamente trasmite.

    Todo un acierto.